Aunque para muchos septiembre signifique el fin de las vacaciones y la vuelta a la rutina (ya sea por las clases o el trabajo), para otros es el mes ideal para disfrutar de unas vacaciones mucho más tranquilas. Los precios son un poco más económicos, las playas y los hoteles mucho menos concurridos y el clima sigue siendo bueno y caluroso, pero más disfrutable que en pleno verano.
Este articulo está dedicado a todos aquellos que desean navegar, pero no quieren hacerlo en plena temporada. Aquí tenemos cinco razones por las que alquilar un barco para navegar en septiembre es una muy buena opción.
☑ Lugares de ensueño sin aglomeraciones.
¿Sueñas con navegar por las Baleares, las cicladas o alguna de las hermosas ciudades de la costa croata, pero no te gusta estar rodeado de tanta gente? Entonces septiembre es el mes ideal para ti.
Septiembre es para muchos el momento de volver a la vida laboral y despedirse del verano, pero éste último sigue presente. En esta fecha puedes disfrutar de todos esos hermosos lugares concurridos por muchos turistas en temporada alta, pero con mucha más tranquilidad. Habrá mucho menos tráfico de embarcaciones, espacio en los puertos y en hoteles, lo que hará que tu experiencia sea más amena.
☑ El clima ideal, estamos en ese momento de que no hace ni mucho calor ni mucho frio.
¡En septiembre sigue haciendo calor! Este mes es ¾ verano. Por estas fechas el clima sigue siendo cálido, pero mucho más relajado que en pleno julio o agosto. El clima te permitirá disfrutar de una playa o piscina para refrescarte, pero igualmente de un poco más de aire para no sentirte abrumado por las temperaturas.
Así mismo, el viento en algunas zonas ayudará a los navegantes con amplia experiencia a poder disfrutar al máximo de la vela.
☑ Hay más barcos disponibles en este momento.
En esta época hay más disponibilidad en cuanto a alquiler de barcos ya que muchos de éstos se liberan luego de que los turistas se van. Tendrás mucha más facilidad para encontrar el velero o catamarán de tu preferencia. Sin embargo, debes tomar en cuenta que dependiendo del lugar en dónde desees navegar, puede que haya que organizarse con tiempo, ya que muchas empresas suelen desplazar sus barcos a otros puertos el resto del año.
Septiembre es final de temporada. Esto quiere decir que para muchos turistas es el momento de volver a casa, al trabajo, a la rutina y por lo tanto dejar atrás estos lugares paradisiacos. Este periodo tiene grandes repercusiones en las zonas costeras, ya que el turismo empieza a disminuir, y el sector debe adaptarse para seguir manteniendo visitas. Por estas razones, suele haber mucha más oferta con respecto a los precios de alquiler de barcos, de hoteles, pero también bajan los precios de restaurantes y bares ya que se vuelven menos concurridos.
Para aquellos que prefieren dormir en puerto, habrá muchísima más disponibilidad de amarres y los precios de estos disminuyen considerablemente, llegando a costar incluso la mitad de lo que costarían en temporada alta.