Si alguna vez has navegado en la Bretaña Francesa y te apasiona, estas islas son una alternativa perfecta. Alquilar un barco en las islas Normandas es toda una experiencia al viento.
Salida de Grandville a bordo de un Grand Soleil 37 de Ecomer Location
Embarcando el sábado a medio día con compra e inventario hecho, es recomendable pasar por Chausey. Por puro azar, llegamos en un día cuando desembarcan las Regattas de Chausey con un ambiente festivo muy acogedor. Navegantes, pescadores y gente autóctona se acercaban para bailar toda la noche.
Al día siguiente, dejamos el archipiélago radiante de sol (el cual no vimos más hasta nuestro retorno), izamos las velas, y navegamos rumbo a Jersey. Nos acompañaron y se dejaron ver delfines durante bastantes minutos a lo largo de nuestra travesía.
Jersey es la isla más grande de las islas anglo normandas que guardan en sus vestigios rastros de sus antiguos conflictos con sus vecinos franceses.
Hoy, es agradable atravesar sus calles comerciantes y sentarse en Blue Note Bar para escuchar un concierto de blues o deambular en bicicleta bordeando sus calas.
Alquilar un barco en Jersey no es nada simple, es mejor alquilar un barco en Saint Malo; Diélette o Granville. Aunque la marina Saint Helier está muy bien equipada y cercana al centro de la ciudad.
Seguimos nuestra singladura hasta las isla de Sercq. Esta isla es un paraíso para amantes de los crustáceos como el bogavante. Hay boyas a disposición en algunas calas y fondeaderos increíbles que en ni en pleno verano estará lleno, dejándoos disfrutar con pleno confort.
Sin embargo, no pudimos descubrir Herm debido al mal tiempo. Aunque pudimos visitar
St Peter Port en Guernesey al día siguiente.
Guernesey es mucho más típica que Jersey sin ninguna duda. Desde el embarque tendréis a vuestra disposición una buena cantidad de restaurantes tradicionales donde es bueno refugiarse después de una navegación tan deportiva.
Lo mejor para explorar la isla, es alquilar una bici y caminar en las playas a lo largo de norte de Guernesey llenas de kite surfers.
También podéis visitar la mansión de Victor Hugo, en lo alto de St Peter, una verdadera excentricidad del dramaturgo donde vivió durante más de 15 años de exilio.
Los mejores recuerdos
- Los delfines de Chausey
- La cena de bogavante pasando la noche en la cala de Sercq
- La pesca de caballa
- La balada en bicicleta alrededor de Guernesey y el panorama de
Moulin Huet Bay
- El pequeño puerto de Gorey debajo del Castillo de Mont Orgueil en Jersey.
- La navegación con el spinakker en las Minquiers.
