El Covid19 ha modificado radicalmente nuestras vidas como un temporal improvisto que todavía estamos capeando.
Desde GlobeSailor hemos querido entender qué impresión tienen los navegantes sobre esta situación para poder volver a disfrutar de su pasión: el viento, la vela, la mar y la navegación.
Es por esta razón que hemos interrogado en esta encuesta a nuestros clientes para entender dónde nos llevará el futuro de la navegación. O al menos, entender las impresiones de los navegantes de recreo que tienen como hábito; principalmente, el alquiler de barcos.
La navegación continúa adaptándose a la desescalada. ¿Cuáles son las perspectivas de esta industria en un futuro más próximo y a largo plazo? Con las fronteras todavía cerradas de ciertos países, con la actividad de las compañías aéreas reducida, ¿cómo estamos preparando nuestras vacaciones este verano o dónde navegar? Una crisis sanitaria sin precedentes que seguirá de una crisis económica. ¿Qué presupuesto tendrán previsto los navegantes de recreo para sus vacaciones de este verano? ¿Qué medidas consideran necesarias o qué nuevos servicios esperan de los profesionales de la náutica para garantizar su seguridad y navegar con la máxima serenidad?
Para no perder el rumbo le hemos pasado el timón a nuestros clientes clientes para que puedan guiarnos a buen puerto. Hemos recopilado un total de 428 respuestas en esta encuesta. Os dejamos aquí la síntesis que hemos obtenido sobre la perspectiva y las tendencias a tener en cuenta para este futuro próximo.
Perfil de los encuestados: ¿Qué tipo de navegante eres?
El perfil del navegante de recreo encuestado muestra una mayoría de hombres con una edad media de 53 años. Destacan en gran medida los navegantes entre los 45 a 65 años. A diferencia a las pirámides de edades de otras nacionalidades, que tienen a mayor número de edad, más amantes de la navegación de recreo y en concreto del alquiler de barcos. Esto podría encajar con las hipótesis sobre la cultura de navegación en los países de habla hispana ha llegado más tarde y no se ha considerado tan extendida, como explican con detalle en el documental "España, a toda vela", máximos representes de mundo de la navegación española.
Las actividades náuticas practicadas en la navegación de recreo son en un 60% el alquiler de barcos. Cabe destacar que un gran porcentaje de los clientes encuestados también son propietarios de una embarcación. En porcentajes menores se observan otras tendencias, respecto a navegantes que optan por la co-navegación o por el crucero en cabina.
Estas respuestas nos generan nuevas preguntas sobre la decisión de la compra o no de nuevas embarcaciones. Con la crisis del 2008 la náutica sufrió un traspaso y un cambio de tendencia demoledor de la compra al alquiler que bien han definido investigaciones de mercado de asociaciones náuticas estos últimos años. ¿Los nuevos modelos de consumo, la tendencia a la no pertenencia volverá a modificar los comportamientos de los navegantes de recreo? Está por ver.
La confianza económica
El impacto de esta crisis viene determinando bajo diferentes aspectos. Básicamente, es importante definir el índice de confianza de los navegantes de recreo respecto a su nivel adquisitivo, a la inversión del presupuesto para las próximas vacaciones o cuándo prevén la salida de esta crisis a nivel económico.
En cuanto al nivel adquisitivo se estima de una escala del 1 al 10 que puede tener un afectación de 4,9. Lo que determinaría que la mitad de los navegantes estiman que sí tendrá un impacto directo entre sus economías domésticas lo que modificará, previsiblemente, su presupuesto para sus vacaciones de alquiler. Sin embargo, se observa que un 40% de los encuestados no verán una repercusión en su nivel adquisitivo, lo que les incitaría a seguir, dependiendo de las restricciones de movilidad, a continuar con sus planes de navegación y vacacionales.
La gran mayoría de los encuestados pone el horizonte de la recuperación de la actividad en el segundo semestre aunque se prevé una recuperación económica de cara a los próximos años, siendo en su mayoría a partir del 2021 y 2022.
Compra de barcos reportadas
Con lo que respecta a la adquisición de un barco, ¿la crisis ha frenado los deseos de compra de los futuros propietarios? De los navegantes interrogados el 22,2% has respondido tener un proyecto de compra de barco. Nuestra encuesta revela que la mitad (68%) de entre ellos prefiere postergar a más tarde su adquisición. Estos reportes conciernen mayoritariamente la compra de unidades entre 10 y 15 metros (57%). De media, el límite estimado para futuros propietarios es un poco superior de entre 1 a 7 meses.
¿Dónde navegaremos este verano?
Los navegantes se decantan por quedarse en España: Islas Baleares y Canarias; y Península donde los navegantes se sienten más interesados en navegar. No descartan de todas formas, un 28% destinos que puedan alcanzar en avión sin importar que tengan un carácter nacional frente al 10% que optará por un destino que pueda llegar en coche.
El turismo de proximidad se impone este verano en nuestras aguas y las decisiones de navegación.
Es interesante observar como uno de cada dos navegantes de recreo tienen ganas de navegar en cuanto la movilidad lo permita. A pesar de los miedos y frenos que puede provocar esta situación, lo único que frena realmente a los navegantes son las restricciones de movilidad: cómo llegar a la base, básicamente, y la posibilidad de contaminación en el trayecto. Una mayoría bastante representativa opta por unas vacaciones en España este verano, frente a un 9% que prefiere esperar al otoño. Únicamente un 20% de las personas encuestadas prefieren cambiar sus vacaciones para el año que viene. No es por falta de ganas, ni motivación, sino más bien, por la incertidumbre a la movilidad.
El navegante extranjero, ¿navegará en España?
La industria náutica del alquiler de barcos en España, depende, en gran parte, de la recepción de navegantes extranjeros. La mayoría de estos clientes provienen de países europeos como son Francia, Alemania, Austria, Polonia o Italia.
Desde una perspectiva del sector de la náutica hemos preguntado a navegantes de nacionalidades extranjeras cuáles son los destinos de preferencia para este verano. Navegantes de países como Italia, con una costa extensa decidirán quedarse en sus propias aguas, y únicamente un 0,7% optará por España como destino. Algo similar ocurre con el mercado francés, donde sólo un 1% se decidirá por nuestras aguas para navegar. De los clientes procedentes de Alemania, un 7,6% se decanta por España, y con una tasa muy parecida, encontramos a clientes procedentes de Reino Unido, de los cuáles, un 7,1% nos elige como destino.
En este sentido, las cifras no son positivas para un sector que vive de los navegantes extranjeros y que se quedarán en casa o elegirán destinos más cercanos este verano y otoño.
La calidad, el único remedio para la crisis.
Nuestra encuesta pretende escuchar así como entender las necesidades y expectativas futuras para navegar en las mejores condiciones. Los navegantes de recreo se revelan exigentes y están principalmente centrados en sus necesidades 4 grandes temáticas. El conjunto de criterios será imprescindible para conquistar la confianza de los navegantes de recreo, los cuales, reclaman medidas y acciones por parte de las empresas del sector.
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- Higiene y Limpieza (barco desinfectado, ropa de cama impecable, platos desinfectados, sanitarios de las marinas impecables...)
- Flexibilidad (seguros de cancelación, alquiler de corta duración, reserva last-minute...)
- Comunicación y Transparencia (contrato de calidad, condiciones de cancelación explícitas, fijación de medidas protocolarias sanitarias, consejos en caso de enfermedad a bordo, formalidades necesarias...)
- Responsabilidad medio ambiental (reciclaje, utilización de productos ecológicos, compensación de carbono, destinos para navegar más cercanos, restricción de uso de plástico…)
Actores duramente penalizados por la crisis a causa del cierre de puertos, la imposibilidad de navegar y las restricciones de movilidad para la clientela extranjera, las empresas de chárter van a tener que redoblar sus esfuerzos para asegurar y garantizar las condiciones sanitarias irreprochables, pero a la vez costosas. Con mucha probabilidad estas nuevas exigencias serás compensadas por un ajuste al alza de las tarifas que sufren el riesgo de ser necesarias.
Debido, además, de la incertidumbre sobre las apertura de las fronteras de cada país pero, sobre todo, de los desplazamientos internacionales y las medidas sanitarias ligadas. Es primordial que los profesionales se concentren en una clientela local. Y probablemente, el futuro del turismo irá en esta dirección en los próximos años. La crisis sanitaria nos invita a descubrir nuestro litoral y nuestras zonas de navegación que poseen una autenticidad, belleza y variedad únicas.
Podemos imaginar que esta constatación no se limita únicamente al alquiler de barcos sino a toda la industria turística que contemplan la acogida de público (hoteles, campings…) en condiciones óptimas. El objetivo para sobrevivir será ofrecer la mayor transparencia y calidad en las prestaciones.
